Arriesgándome a "quedar mal"

La pregunta clara y no tan simple es:

¿Me amas?

La respuesta simple y no tan clara es:

Si.

Pero vayamos al principio de todo

¿Es claro y simple el amor?... Debería…

Es el sentimiento más hermoso y poderoso

dicen, pero si nos “jugamos” por él

somos unos boludos bárbaros,

y si encima el amor nos pone contentos

y nos hace bailar, saltar y sonreír

la gente nos mira feo….

¿Será por eso que nos da miedo amar?

¿Será que en realidad

el sentimiento mas poderoso es la vergüenza?

¿Por qué esta de moda no amar?

¿Por qué no se nos hace divertido tener el plan

de soñar siempre en la misma almohada

sabiendo que siempre va a estar

“esa persona” cuidándonos de las pesadillas?

¿Es sincero cuando alguien dice

no estar buscando el amor?

¿O sólo es el miedo a sufrir

el que lo paraliza en la búsqueda?

¿Cuántas veces soñas

con el amor eterno y verdadero?

Yo  muchas!

Tengo miedos, demasiados,

pero me enorgullece

no tenerle miedo al amor.

¿Soy una boluda

al sentirme mal en la soledad?

Quizás…

¿Estoy equivocada

cuando suspiro al ver tus ojos?

Quizás…

¿Sufriré mucho

si arriesgo lo que tengo

por esa felicidad?

Quizás…

Pero prefiero arriesgarme en TODO

antes de callar lo que mi cuerpo

necesita decir,

aunque esto, frente a muchos,

quede mal….

Hoy un nene que hizo acordar...

Los nenes juegan a saludar;

es extraño como el saludo

se vuelve una obligación para muchos adultos.

La simpleza de sacar una sonrisa agitando una mano

es mas real que la lluvia sobre el cemento,

o que un montón de chatarra en una esquina.

Y todo esto me hace acordar

cuando nada importaba lo material,

cuando los aviones me gustaban

por el simple echo de volar,

a cuando un pedazo de tierra y pasto

era el mejor juguete con el cual jugar,

a cuando me acariciaban sin pedir nada a cambio,

a cuando los días eran largos,

a cuando el sueño llegaba por tanto reír,

y no por un cansador día de trabajo,

me hace acordar a cuando creía

que todos mis sueños se podían hacer realidad,

a cuando un tren me parecía algo maravilloso,

a cuando el mar era otro mundo para mi.

Ahora que nada huele,

que poco ríe, y que si te hablan

es por algo a cambio,

lo único que me queda para seguir sonriendo,

para seguir volando, para seguir soñando

es el amor,

que se despide de mi

con una mano que se agita suavemente,

como la de un chico jugando.

Inútil deseo de control

No dijiste nada, no dije nada.

Dijimos todo sin palabras.

Una mirada escondida,

un particular rose de manos no buscado.

La tarde fue larga,

y la lluvia no se llevaba lo que nosotros dejábamos levitar.

El ambiente nos pedía besos,

nos pedía alcohol y caricias,

nos pedía, quizás, amor verdadero,

amor que se ríe cuando está, y que extraña cuando no se puede tocar.

La noche siguió, y los días pasaron, y sin entender porque,

la necesidad de que pase lo que no paso

me tiene pensando, me tiene soñando.

Y así como sale el sol de natural

veo que hay cosas que no puedo controlar.

No puedo controlar las ganas de vos,

no puedo controlar las ganas de amor,

no pudo controlas las ilusiones de hoy,

no puedo controlar

que no quieras vivir el tiempo entre los dos.

Prologo

Retazos de amor en la cama, demasiada distancia en la mesa.

Así comenzó un cuento

que acabara de la forma que todos esperamos.

Sin amor inmortal, sin perdices ni felicidad.

Es un cuento que aspira a ser largo;

le hará reír, le hará gozar,

le hará recordar viejos tiempos

y quizás, al final, a todos nos hará llorar.

Hay tantos detalles que van surgiendo, seguramente

muchos se sentirán identificados,

pero ésta es una historia única,

única para los ojos de quien la escribe.

Se contara cada mirada esquivada,

se contara cada caricia obligada

(y si hay sinceras también).

Todos sentirán en su piel lo que el escritor describirá con cada palabra.

Pero usted lector

Por más que sea feliz mientras lea tan intensa historia,

recuerde no esperar un final feliz de película goma,

no olvide que los personajes son personas,

seres humanos,

y a veces estos particulares seres son difíciles de entender;

y para adelantar el final le aviso

que la distancia en la mesa nunca se va a perder

porque el amor de cada uno

se quedo cenando en la mesa de otro cuento viejo.

Y para entender porque posiblemente llore al terminar el cuento,

tendrá que leer los dos paralelos fascículos anteriores,

quizás ahí

encuentre la respuesta de porque tanta pasión,

porque tanto suspiro

y porque tanta distancia fuera de la cama.

Nogal de 20 años

El nogal estaba ahí, inmóvil,

sintiendo como pasa el viento que todo se lo lleva, esperando quien sabe que.

El pino que lo vio crecer

cree que el viento de primavera le prometió un amor eterno hace ya varios años.

Nadie sabe en verdad que espera,

quizás el nogal tampoco sepa, pero ahí se queda, esperando ese “no se que”.

Lo que si se sabe es de su florecer,

de sus extrañas flores de madera, con las que a muchos puede enloquecer.

También se sabe de sus frutos,

que con su sabor puede envolver a cualquiera;

el problema está en que da tantas nueces

que los que las cosechan regalan el fruto y no lo valoran como deberían,

pero bueno…ese es otro tema….

Es otoño y el nogal, ya sin hojas, casi sin frutos

sigue esperando que el aire le de otra pista de lo que debe hacer.

Y aunque se quiera mover,

y aunque no confie en el pino que lo vio crecer, no sabe por donde empezar,

no sabe que hacer con todo lo que vio y aprendió,

no entiende como hacer para arrancar la raíz del suelo para comenzar a andar.

Y cuanto mas pasa el tiempo menos sentido tiene el viento.

El nogal se mueve a su ritmo para entender el mensaje,

deja sus hojas a su merced, le da sus frutos a su amiga la tierra,

recibe con gusto el calor del sol y aunque le resulte insoportable,

sigue escuchando las anécdotas vacías del viejo pino.

Hace todo lo que tiene que hacer para que la naturaleza

le de ese deseado mensaje, esa esperada pista de donde se encuentra

el amor prometido, el amor apasionado.

Llegó el invierno, y el nogal continua atento.

Llegó el viento y le susurró en secreto al viejo pino:

“pobre nogal, ¿Cómo le digo que el amor eterno no existe

y que si quiere una razón para moverse antes, se tiene que mover?”

El viento pasó, las estaciones cambiaron una y otra vez,

el nogal se seco, y el muy infeliz nunca se movió por dos únicas

e idiotas razones:

Por esperar del viento la razón que siempre estuvo en el,

y por el miedo del viento, que nunca pudo decidirse

a ser el culpable de la desilusión de su nogal amigo.

El pino, muy cómodo en su lugar, lo vio todo.

Buen Día

Se despiertan los sentidos,

el sol amanece rasante,

la mente sigue soñando,

se activan los sonidos.

Los perros vagabundos duermen y los motores comienzan a vibrar.

Caminos que no quiero andar,

sueños que no quiero perder,

imagen que no quiero dar.

Sonrisa que nunca voy a abandonar.

Los árboles bailan con al brisa, escapan del cemento que quema.

El movimiento de otro en uno,

cabezas apoyadas en la ventana,

cuerpos aplastados como maza,

voces que no hablan,

encuentro una mirada que quizas respira.

La ansiedad en mi boca, el secreto que a pocos le dije.

La gente colgada en la vía,

amargura por los brazos cansados y tristeza por el tiempo perdido.

El reloj marca la hora y con el mi suspiro.

Gente que ignora porque quiere.

Silencio que habla porque así lo sienten.

El sol de nuevo toca mi piel,

no entiendo porque no lo hace siempre.

El sueño cae sobre mí, los ojos cansados seden

y de nuevo la gente que con sus brazos cansados muere.

Descripción de un día de Renuncia

La puerta no deja de hacer ruido,

los pasos de la gente pisotean mi cabeza.

Los necios entran y preguntan estupideces.

Quiero algo nuevo, observo mientras escribo.

Una maquina vieja, más lenta que la conciencia.

Me muestran sus celulares,

me hablan rápido, y como es de esperar no miran a los ojos.

Muchos buenos días tuve hoy,

poca sinceridad también.

Rodeada de payasos con poca pasta de campeón

me quiero ir a la calle y sentir el calor del sol.

La puerta sigue, ya sin pasos momentáneamente.

Colas para pagar.

Colas para saber.

Colas para amar.

Escaleras sin ascensor,

para que muchos no puedan subir.

Mal humor, aburrimiento, sueño y rapidez.

El dolor que me pone mal, y el celular que sigue sin sonar.

Se que me voy a ir, se que lo voy a abandonar, se que no es mi lugar

y que hay cosas a las cuales disfrutar.

Voces suaves sin fuerza para gritar.

Gente con miedo que te despide hasta luego.

Plata, enojo, burocracia, y si, mucha mas burocracia.

La maquina registradora no para de sonar,

se gasta el papel solo en pagar.

BASTA CON LA PUERTA!

Por favor rompan esa puerta!

Rómpanle los tacos a la señora de anteojos,

rompan la caja registradora y los sellos de la burocracia también!!

Mi cabeza quiere estallar,

quiero prender fuego esta hoja con la punta de mi lapicera!

Quiero salir volando, quiero escapar…

Como va a molestar señora? Estoy acá para que pregunte.

No se amontonen, estoy sola y no puedo hablarle a todos.

Llego el cerdo, vino a controlar;

vacía las cajas, cuenta papeles y se va.

Seres feos con sus armas en la cintura,

que bueno que mi bolso no es transparente,

muchos se sorprenderían de lo que hay.

El tiempo no pasa, la aguja no avanza.

Arrastran los pies y molesta.

Porque me molesta? No lo se, pero hasta las gracias me molestan.

Necesito estirar las piernas,

necesito sentir el viento y el sol, eso tranquiliza a cualquiera….

Me quiero tranquilizar?

Camino

Me cuesta imaginar que es posible lo que imagino, pero no dejo de soñar porque se que ese es el camino.

Nuevo Plan

Palabras

que llenan de preguntas y respuestas la cabeza

de alguien que creia saber sufrir.

El dolor le invade el corazon,

llegando a travez de sus venas a todos su cuerpo,

el cual esta retorsido en su cama, pidiendo ayuda,

quizas solo un abrazo.

Las preguntas duelen,

las respuestas mas.

Cambios dentro de su cuerpo,

quiere explotar.

Ponerce a prueba es el nuevo plan.

Sentirse bien con ella para luego,

poder soñar con plena libertad.